"Navegamos sin más pretensiones que ver los ríos libres"

Jorge Mazzochi, Sebastián Arena y Hernán Gigena partieron días atrás en kayak desde El Pintado a Buenos Aires.

“La hoja es el equivalente a la vida”

Entrevista con Franco Rivero

viernes, 25 de abril de 2025

Kike Álvarez: La vida humana es un soplo frente al majestuoso Paraná

 


Él es violinista, pianista, compositor y director de orquesta. Desde Encarnación, Paraguay, ha crecido mirando el río y desde niño ha sido su fuente de inspiración. Creo una obra musical llama Que no se enoje el Paraná. En esta charla desentrañamos cómo surgió esta pieza artística.


Por Paulo Ferreyra 


/ De pronto sentí el río en mí, / corría en mí / con sus orillas trémulas de señas,/ con sus hondos reflejos apenas estrellados. / Corría el río en mí con sus ramajes. / Era yo un río en el anochecer, / y suspiraban en mí los árboles,… Así escribe el poeta entrerriano Juan L. Ortiz.

 

Hace un par de semanas atrás la Orquesta Sinfónica de Corrientes interpretó parte de una obra inédita para los oídos correntinos, la obra de Kike Álvarez. El título de la misma, Que no se enoje el Paraná llamó profundamente la atención de muchos y sobre ello hablamos con él autor por teléfono.

 

“Que no se enoje el Paraná habla de la reacción de la naturaleza a todo lo que el hombre hace para alterarla o perjudicarla. La humanidad arrojando desechos tóxicos y basura. La naturaleza es representada por nuestro querido río Paraná. En la música se oyen dos motivos musicales que representan a dos personajes,  el hombre burlón que se dirige a la naturaleza y el imponente río”, así describió Kike Álvarez sobre su propia obra.

 

Cabe destacar que él es violinista, pianista, compositor y director de orquesta. Nació en la ciudad de Encarnación, ciudad situada al sur de Paraguay en la frontera con la ciudad de Posadas, Misiones – Argentina.

 

Creció mirando el río Paraná. Para conocer el germen de su obra hay que remontarse – literalmente – a los años de su infancia. Hubo un tiempo que vestía pantalones muy cortos y se iba al patio de un colegio que estaba frente a la terminal de ómnibus de Encarnación. En ese lugar iba hacer volar la pandorga. Un día estaba remontando de lo más bien pero un momento se corta el hilo y la pandorga fue a parar atrás de la terminal.  Era niño y tenía prohibido cruzar la calle. Tenía permiso para ir hasta la escuela nomás.

 

Como buen niño desobediente se atrevió a cruzar la calle para buscar su pandorga. Del otro lado de la terminal hay una bajada y está la parte más antigua de la ciudad. El casco original si se quiere de Encarnación. Desde ese lugar apreció la ciudad pero también se amplió ahí su visión al ver el imponente río Paraná. “Era un cuadro de una obra inmensa”, recuerda ahora que viste pantalón largo y sigue viendo como se extiende el manto de agua azul.

 

Quizás ya estaba completa la imagen pero como si fuera poco pasó el tren. La imagen de Kike Álvarez se completó con el paso del tren Carlos Antonio López. Lo vio y lo pudo escuchar con todo su potencial, el tren – en el decir de Juan L. Ortiz – creció en él con su paso firme, con los años y su música. “Ese fue un momento crucial de inspiración que pude para plasmar, hacerlo cuento y después música”, afirma en esta charla.


 

Recorridos de la obra

 

El río Paraná es uno de los ríos más grandes del mundo. Paraguay tiene otros ríos potentes como el río Paraguay y Pilcomayo, pero Kike Álvarez creció viendo y sintiendo de alguna manera el río Paraná. Su obra fue estrenada en el 2016, en un encuentro de jóvenes directores que realizó la Orquesta Sinfónica Nacional, en ese momento dirigida por el maestro Juan Carlos Dos Santos.

 

El maestro Dos Santos fue quien incentivó a Kike a terminar la obra que tenía en proceso. “El maestro me preguntó sobre la obra que estaba escribiendo, me alentó para que termine. Ahí terminé y fui a presentarla. En el 2021 presenté la obra para competir por el premio nacional de música sinfónica de Paraguay. Obtuvo el primer premio. Ahí ganó la música, no gané yo sino que ganó la música”, afirma hoy entusiasmado. Es una obra que los músicos de su país la conocen. Kike sueña ahora que la obra se siga difundiendo a nivel región y a nivel mundial.

 

 

Cuento - El Paraná

 

Es un gigantesco y caudaloso río que en su manifiesto representa a la naturaleza a través de la música y las profundas imágenes de dicho río.

 

 

En esta historia tenemos 2 personajes cruciales que son:

Nuestro distinguido río, representado por el acorde del Paraná (música) y la burla del hombre (ser humano) que no respeta a la naturaleza, representada por un motivo musical (imágenes de la basura y construcciones sobre el río).

 

 

Ambos personajes empiezan el diálogo musical y van desarrollándose, extendiendo cada uno su discurso.

La burla grita y se expone, el Paraná se impone, esto se reitera 3 veces hasta que la burla consigue aliados, pero la naturaleza es, y será siempre, mucho más grande y fuerte.


 

El Paraná empieza su movimiento a través de la música e imágenes, la burla canta a la par utilizando recursos musicales del mismo Paraná, también aparecen personajes secundarios como: personas asustadas, animales desorientados e imágenes tanto de la naturaleza como del desorden hecho por el hombre.

 

En representación de la burla, a través del hombre, tenemos a un personaje (actor hombre) llamado José, que incita a que la naturaleza sea siempre violentada y abusada, lo cual demuestra su maltrato a animales y plantas, altera cauces hídricos, impone la deforestación, crea falsos protectores de la naturaleza, finalmente por intereses monetarios, justificando con la mentira del progreso y el desarrollo.

 

El Paraná es también un personaje “ficticio” llamado Yguazú quien manifiesta su majestuosidad en todo momento a través del mismo acorde y las imágenes de la profunda naturaleza como, a pesar de tanto desorden puede, de igual manera, mientras dormimos, limpiarlo todo, cuidarse y cuidarnos.

 

De igual manera, demuestra su enojo hacia tanto mal y tanto maltrato, que nos da un presagio de lo que podría pasar si es que no detenemos todo esto que plantea el “hombre”. A la cual la burla insiste con su idea, de que el Paraná siempre es muy determinante.

 

El Paraná empieza otro tipo de movimiento en forma de fuga, conectando a sus especies; animales de gran porte, árboles, viento, aves y recursos naturales que pueden llegar a lo más alto, viendo todas las cosas que planea hacer la burla a escondidas.

 

En esta parte, el Paraná se encuentra en un estado irregular con sus olas y una suave pero presente brisa, en donde aparece, poco a poco, un nuevo personaje llamado “Carlitos” que sería el tren a vapor (música e imágenes) quien, con solvencia y sobriedad, se trae consigo un nuevo perfil de lo que sería el progreso.


 

 

El Paraná lo acepta, lo abraza y lo acompaña con una Guarania oculta. Detrás de este,  aparece un nuevo personaje mujer (soprano lírica) llamada Itacuá como la parte religiosa, creencia de los hombres, sublime alegoría de lo que ella nos diría “no se preocupen, todo estará bien, que así sea (amén)".

 

 

Ella también escuchó todo lo sucedido antes, por lo tanto, su canto se basó también en aquello.

 

Es el momento en que ella invierte el motivo musical y La burla escondida, ¡es descubierta!

 

En donde el Paraná se enoja y demuestra toda su furia en defensa de lo que nos acecha.

 

 

La discusión entre nuestros personajes se van alterando de manera creciente, Itacuá ve que se avecina la gran tormenta y huye cantando el motivo musical  de la burla, es allí en donde el Paraná se impone absolutamente sobre la burla del hombre y demuestra lo que había presagiado algún tiempo atrás, y con truenos y golpes, a la puerta del destino, la toca 3 veces en forma agresiva y 3 veces un poco más suave. Aquí es donde vemos llegar a la gran tormenta basada en un movimiento armónico intenso de la parte musical e imágenes (quintas disminuidas y cuartas aumentadas).

 

También se oye el primer canto de Itacuá, pero de una manera menos armoniosa, más sufrida e intensa (percusión).

 

Podemos apreciar el desorden causado por La burla del hombre y la misma naturaleza alterada y fuera de sí.

 

 

De esta manera, vemos cómo la tormenta se lleva todo, tanto a los pájaros, personas, escombros y al mismo tren Carlos A. Lopez en donde colisiona y aquí nuestro personaje a vapor deja de existir.

 

 

La burla, como si nada, vuelve a emitir su llamado, a lo cual el Paraná le responde de la misma forma que siempre.

 

En la siguiente escena vemos cómo el Paraná está de manera irregular como antes, con sus olas y ventisca, a lo cual el motivo de la burla afectó a los seres humanos y la cantan con dificultad, también podemos distinguir a la guarania oculta, así como los acordes del Paraná haciéndose sentir siempre.

 

 

Nuevamente la burla, con un aliado, pretenden emitir su llamado, a lo que logran nuevamente e incluso más agresivamente, la reacción del Paraná, al final sentimos como el movimiento musical representa ya todo lo expuesto anteriormente; personas corriendo ocultándose, animales huyendo, pájaros migrando, en un absoluto alboroto y desorden oímos el último grito de la burla, ya débil y anciana, a lo que el Paraná le responde con la mismísima vitalidad que la primera vez.

 

 

                       Fin

 

Está más que claro que no tenemos ni idea de la edad que podría tener la naturaleza ni cuánto más podría estar aquí, solo sabemos que la vida humana es solo un pequeño soplo a su paso.

 

Kike Álvarez

miércoles, 23 de abril de 2025

Marie Gouiric: “Los libros son para mí un mapa afectivo”

Marie Gouiric - Foto Jose Nico

En el día internacional del Libro charlamos con la docente, poeta y narradora Marie Gouiric. Publicó libros de poesía y narrativa, Este amor tan grande, Un método del mundo, Botafogo, Ese tiempo que tuvimos por corazón, De dónde viene la costumbre, entre otros. Afirma aquí que escribir le hace bien, le gusta, después si es poesía o narrativa es otra cosa, “el tema es escribir”.

 

Por Paulo Ferreyra

 

Este recorrido puede llevarte 5 minutos,

pero es difícil calcular el tiempo

cuando la estás pasando bien.

 

Así escribe Marie Gouiric en un poema que lleva por título Un poema de amor o el origen de la vida. Voy a ir robando algunos versos de su poemario para dar respiro al texto. Ella pasó del aula a convertirse en una escritora importante dentro de la literatura argentina, Tamara Tenenbaum, Gabriela Cabezón Cámara, Selva Almada, Eugenia Almeida, entras escritoras ponderan sus textos.

 

Marie cuenta en esta charla telefónica que ser docente le gusta porque significa un contacto directo con la realidad inmediata. Sucede que todo lo que pasa en la calle, en la televisión, en los medios, los cambios tecnológicos, todo golpea inmediatamente en la escuela. Tiene la certeza de que la docencia - lejos de ponerle la piel de chancho y pensar que nada le afectará - le pasó al revés. La docencia la humaniza. Estamos en una época de mucha deshumanización y crueldad, en este contexto la docencia te invita a ser compasiva.

 

— Voy a comenzar con una de las frases que tengo subraya en uno de tus libros: “Podrás enseñar cuando haya un arcoíris directo de un corazón a otro corazón”, ¿cómo llegaste a ese concepto?

 

— Tengo que hacer una primera diferencia. Una cosa es el recorrido que hice como docente y otra cosa es el recorrido que hago como escritora.

Esa frase es una construcción de la escritora. En la imagen tan lúdica, tan brillosa de un arcoíris moviéndose e incluso el permiso para usar una frase tan cursi, porque no deja de ser cursi o tierno, pero eso lo hace la escritora. Después la idea de entender que para poder enseñar hay que vincularse y construir ese vínculo, ese es el aprendizaje de la maestra, del docente. Esas dos cosas conviven en lo que hago.

 

La que escribió esa novela es mi parte de escritora pero está nutrida por mi trabajo de docencia. Lo viví así y llegué a ese aprendizaje como docente trabajando en las escuela, teniendo alumnos, dándome cuenta de que a veces estás muy apurada para que les chiques aprendan algo y si no construís un vínculo ellos no te escuchan.


 

Me acuerdo que una maestra me dijo que los chicos son lieros y que se portan mal. Pero vos tenés que hacer cosas con ellos, que hagan cosas, porque cuando ellos ven que con vos hacen cosas te empiezan a querer. Ahí vos podes enseñar más. Eso lo descubrí como docente pero vuelvo a decir - la que llegó a esa frase fue la escritora.

 

— Es una construcción que trasciende el ámbito de la docencia.

 

— Cuando escribí eso pensaba si podía funcionar dentro de la literatura o si no iba a quedar muy tonto. Sin embargo es la frase que les lectores más subrayan. Es la frase con la que los lectores más me etiquetan o la frase que más los emociona.


 

Además esa frase no solo se refiere a la docencia sino que refiere a algo que está en el mundo y que se tiene que mover entre las personas, para que el otro puede ser y existir, para que pueda tomar decisiones.

 

En el texto la protagonista va diciendo que ese arcoíris está entre ella y su papá, entre el alumno y el perro que le salva la vida, a su vez el corazón del perro vuelve hacia ellos, es algo que se mueve cuando nos podemos vincular de una manera particular con el otro.

 

— Es una manera diferente de construir el mundo

 

— Si, es una manera de construir un mundo sobre todo en este tiempo donde todo está apoyado en el individualismo, en lo que el otro me puede dar o lo que le puedo sacar. Estamos viviendo épocas muy duras. Entonces pensaba - si bien esa novela es del 2023 - en pocos años se terminaron de acentuar ideas políticas de mucho egoísmo. Esa posición de salvarse solo o de que el otro no vale nada. Esta novela tiene un mensaje que discute totalmente ese discurso.

 

 

Ahora me pregunto

dónde tiene existencia las cosas.

¿Durante el orden de los factores

O en el resultado?

 

 

Entrar y salir del enojo

 

En esta charla con Marie Gouiric hablamos mucho de unos de sus libros, Ese tiempo que tuvimos corazón. De las cosas que están en el libro y cosas que le quedaron por fuera del libro pero que de algún modo la siguen acompañando.

 

Una de las cosas que no están en el libro pero sí ella ha resaltado sobre lo que le dejó el contacto directo en el aula es la entrada y la salida del enojo. Les niñez tienen otra relación con los enojos. Sobre todo con los enojos más inmediatos. Ellos también tienen rencores y dolores muy profundos. Marie cuenta que aprendió de ellos entrar y salir del enojo, “en el aula cuando estoy frente a ellos necesito enojarme. El otro te enoja. Pero son entradas y salidas al enojo mucho más rápida. Eso lo observé de ellos y empezar a ejercitarlo. A veces el enojo es solo una marcada de límite y hasta forma parte de una actuación para que el otro pare y se detenga”.

 

 

Ella trabaja mucho. Nos intercambiamos aciertos y desaciertos hasta que pudimos detener un tiempo para la entrevista. Hacemos una video llamada, se muestra muy atenta, escucha con interés cada pregunta y sus respuestas se van masticando a medida que vamos conversando. Puedo decir que también me regala un no con un sí al lado.

 

En la relación que tuvo como docente no cambió para ella la idea o el concepto de amor. Sin embargo, cuenta, que la idea de obediencia es algo que sí empezó a discutir mucho. “Soy una persona que tiende a ser muy obediente. Fui muy obediente y tuve una infancia muy obediente. Entonces, otra de las cosas que aprendí de mis alumnos - que son los que están contados con sus ficciones en mis libros - fue la desobediencia”, agrega.

 

La desobediencia aclara es una actitud que puede estar bien, a veces desobedecer no es algo súper dramático que le hace un daño a otro. En ocasiones desobedecer puede significar varias cosas, por ejemplo, no quiero estar acá, quiero comer ahora, quiero hacer otra cosa o simplemente significa poder elegir. La desobediencia le repercutió mucho cuando estaba con sus alumnos porque se cuestionaba cosas, por ejemplo, si retarlos o no, si ciertas cosas estaban bien o estaban mal.

 

 

Elenita dice que estaban las dos solas,

Pero estaban las dos juntas.

 

 

— Me interesa indagar un poco más en la desobediencia, ¿en la escritura también te sirvió?

 

— Totalmente, para ponerte a escribir a veces tenés que desobedecer. Soy de una clase trabajadora. Soy de una familia obrera. Para mí decir voy a escribir fue una desobediencia porque en realidad no se espera eso de mí. Ni yo lo esperaba. No sabía que era algo que podía hacer.

 

 

— Hay algo que subyace acá es el peso de las palabras para los niños, ¿Cómo fue tu proceso de escritura para nombrar cosas y escoger estas palabras?

 

 

— Creo en las palabras porque soy una trabajadora de la palabra. Si sos escritora tenés que creer en las palabras. Entonces creo que las palabras modifican momentos, actitudes, como poder decir algo o la forma de expresarse. Pero manejo ahí una doble cara porque creo mucho en las palabras pero a la vez descreo totalmente. Entonces, esa es mi manera de enfrentarme a la escritura.

 

Es como decir esto es lo mejor que puedo decir y al mismo tiempo estoy fracasando. Acepto el fracaso. Para mí la palabra es un fracaso de antemano, aceptando eso es más posible trabajar y sentarse a escribir. Confió mucho en la intuición, en lo que pueda sentir frente al lenguaje y no creo que el lenguaje sea solamente razonamiento.


 

— Las palabras se sienten.

 

— Claro, las palabras se sienten. Entonces no solo elijo las palabas por lo que significan, las elijo por musicalidad, porque son divertidas, por muchas razones y en ese contexto el lenguaje es importante porque devela mucho. Cuando uno escucha a otro hablar - piensa ah, mira esto. El lenguaje expone mucho y a la vez el lenguaje es el fracaso absoluto del ser humano.

 

El lenguaje no reemplaza las experiencias. Es como ese poema de Alejandra Pizarnik que dice - si digo agua ¿beberé? Escribo esa novela sobre la docencia y sus alumnos, pero lo que realmente tendría que poder hacer es ir y salvar a esos personajes, que yo esté escribiendo esta novela es porque el lenguaje fracasó ante la realidad.


 

 

“Aquí cada libro tiene su historia”

 

Hoy 23 de abril es Día Internacional del Libro. Esta fue la excusa para hablar con Marie. Ella tiene una biblioteca chica. Sonríe y por momentos ahora su rostro se ilumina. Sonríe con los ojos. Le llega el brillo del celular que está usando para comunicarnos pero también porque en este tramo de la entrevista le llueven los recuerdos.

 

“Para mí los libros son un mapa afectivo. Cada libro tiene su historia. Eso me parece increíble. Los libros para mí arman los puntos de un mapa en el tiempo. El libro que tengo acá está mordido por una perra que se ya se murió, pero veo el libro ahora y veo su marca, se lo voy agradecer toda la vida”, cuenta y sus ojos se pasean por esas hojas.

 

En la charla me muestra algunos libros, por ejemplo una edición del libro El segundo sexo de Simone de Beauvoir. Mientras lo toma en sus dos manos rememora el tiempo en que ese libro llegó a su casa. “En un momento de mi vida me habían pasado unas cosas feas y una amiga me recomendó leer ese libro. A veces el libro para nuestra generación sigue siendo un lugar para encontrar pistas en el mundo. Hay alguien o un otro que pensó algo y ya lo dijo por vos. Además los libros son promesas de escrituras futuras, en los libros me apoyo para escribir, no creo que todo el material salga de un libro pero si encuentra compañeras”, cuenta y me tiento de robarla más horas para sumergirnos en la historia de otros libros. “El libro para mí no es un fetiche. Es el mapa de mis afectos”.


 

viernes, 18 de abril de 2025

Nat: “Siento que todo los seres venimos para amar”


Este sábado 19 de abril La Chula (Argentina) y Nat (Paraguay) se presentarán juntas en La Felipa Verde. Es una oportunidad para escuchar a estas artistas jóvenes, con sus composiciones y viajar por pistas noveles. Con Nat hablamos de estos temas y de amor, “Siento que todos los seres venimos para amar”, expresó. En una charla con La Chula hablamos de su música y sus caminos de inspiración.


Por Paulo Ferreyra 


Nat es la primera vez que llega a Corrientes, al respecto se expresó “súper emocionada”. Ha visitado otros lugares de Argentina pero todavía no había llegado a las siete puntas. En comunicación telefónica Nat agregó, “Tengo mucha ilusión y emoción por ir a Corrientes porque siento que tenemos muchas cosas en común. Tenemos más cosas en común que diferencias, aunque geográficamente estemos separados siento que la región nos une”. 


Esta es la primera vez que se juntan Nat con La Chula. Nat también por estos días está escuchando la música de La Chula. “Estoy escuchando su música y me parece fabuloso que nos hayan convocado a las dos, tenemos en común el instrumento - las dos tocamos el contrabajo”, agregó con un entusiasmo que se desborda de alegría y felicidad. Estas dos artistas tienen en común el instrumento pero también sumarán a la tarde correntina el hecho de traer canciones que vienen componiendo y creando.



Un río guaraní

 

La música de Nat es como un río, corre por momentos suaves y por momentos galopa con la fuerza de las emociones. Trae el calor del sol que riega el pulso de las personas, la cadencia de su música viene de la región y un poco del calor de latinoamérica, “siento que latinoamérica - a pesar de que nos hemos dividido en varios países sigue siendo una misma tierra, mis canciones tienen esa fuerza que viene de mis influencias de la música que me gusta y del ritmo del 6 x 8 que nos marca como región”, explica.


En algunas canciones de Nat aparece la lengua guaraní, ella dice que es el guaraní paraguayo, “lo llamo así porque soy honesta - agrega - hablo guaraní. Me comunico así con la gente y hay canciones que me vienen así, con esas palabras y con la honestidad del lenguaje. Tengo respeto hacia los pueblos originarios que es diferente al guaraní que hablamos nosotros o en otras partes de la región”. Su lenguaje es una evocación a los pueblos originarios por quien siente un profundo respeto y su homenaje es honesto. 



En 24 x 7 para amar


En relación a su proceso creativo Nat cuenta que no tiene bloqueos o pánico a la hoja en blanco, que incluso por momentos siente que debe frenar su proceso de creación para no componer 24x7. “A veces viene una melodía o a veces viene la letra, depende de cada caso. Trato de que mi proceso creativo sea libre, sin ataduras y sin parámetros o planteos ante un ritmo determinado”.



En ese río de las canciones de Nat se respira el amor. El amor se pasea por sus canciones y ella suelta sus palabras para profundizar esta cuestión, “el amor es una fuerza vital y es una energía que da vida. Es casi sinónimo de vida porque el amor da vida. Siempre está el amor presente, hasta cuando hablamos de desamor hablamos de amor y es ahí donde sigue habitando el amor, es una fuerza vital que nos acompaña todo el tiempo. Por lo menos lo siento presente en mi vida de una forma vital todo el tiempo. Le doy libertad al amor para que esté presente en todos mis procesos creativos - incluso cuando hablamos de cosas que no dan tanto gusto o incluso nos dan dolor, el amor esta presente”. 


“Siento que todo los seres venimos para amar, a veces nos olvidamos nomás, pero creo que el único objetivo real en este plano y en esta vida es experimentar el amor en todas su facetas, todo es amor - yo lo veo así, no es romanticismo, tampoco es optimismo ciego, simplemente el amor es una energía vital y está en todos todo el tiempo, a veces nos olvidamos de ello pero el amor - desde mi parecer - está ahí presente”. 




La Chula: “La música cumple roles importantes en mi vida”

 


Este sábado 19 de abril La Chula (Argentina) y Nat (Paraguay) se presentarán juntas en La Felipa Verde. Una oportunidad para escuchar a estas artistas jóvenes, con sus composiciones y viajar por pistas noveles. En una charla con La Chula hablamos de su música y sus caminos de inspiración, además con Nat charlamos de estos temas y de amor, “Siento que todos los seres venimos para amar”, expresó.


Por Paulo Ferreyra 


Hace unos meses atrás La Chula lanzó el disco Orgánica. Entre sus temas está Eleonora. La sonoridad llega con acordes de guitarra muy limpia, su voz cantada y recitada, el sonido de las aves recorren esta melodía como agua limpia y cristalina, por momentos emerge ancho y con fuerza un arroyo misionero.


Sobre Eleonora la artista cuenta que compone al revés que muchos musiques, ella primero hace la melodía y después escribe la canción. No se pone y no se ata a ninguna estructura. “Cuando compongo voy con libertad, no pienso en un determinado género ni siquiera tengo pretensiones de que aparezcan determinadas notas. Mi forma de componer es jugar con la guitarra hasta que salga algo o hasta que me gusta una melodía”, explicó en el inicio de esta charla. 


La canción de la que estamos hablando viene de un cuento de Edgar Allan Poe que justamente lleva ese título, Eleonora. Se habla aquí de una amor prohibido, pasional, quizás muchos amores son así, prohibidos y pasionales. Sobre los sonidos de selva que están en la canción La Chula agregó, “como misionera, aunque no busque hacerlo mi sonoridad se remonta al monte, a los pájaros y al agua, así nació la idea de poner esos sonidos en esta melodía”.



Ella es de Eldorado, Misiones. Esta ciudad está a unos pocos kilómetros de Iguazú. Hace quince años que llegó a Corrientes. Cada tanto vuelve a la tierra colorada donde vive su familia. Es profesora de Contrabajo, bajista, cesionista, cantautora, gestora y productora cultural. Ya lanzó dos discos. Ha recorrido diferentes escenarios de la región, en la edición 2024 del Taragüi Rock se presentó con una formación eléctrica.


Lazos con músicos de Paraguay


Hace un tiempo viene entrelazándose con artistas de Paraguay. Se ha presentado en la ciudad con diferentes artistas y también viajó a Asunción para compartir escenarios con artistas de ese país y llevar su música. Estuvo con Purahei Soul, Passiflora, entre otros, ahora a esa conjunción y convivencia se sumarán dos presentaciones con Nat en Corrientes y en Resistencia. La Chula en estas presentaciones se presentará sola, con la guitarra criolla y llevará en un cuenco sus propias canciones. 



“Leo mucho - escribo mucho”


En esta charla La Chula resalta que la música es un refugio, un psicólogo, “la música cumple roles importantes en mi vida”, subrayó. Sus temas están en distintas plataformas digitales para escuchar. Nos detuvimos para hablar de otra de sus composiciones, Machado.


“Machado es un reggae. Se salió un poco de mi línea de folclore. Este sigue la línea de un poema de Antonio Machado. Leo mucho desde muy chiquita, no sé porque ya que nadie me incitó a leer pero encontré un gusto ahí en la lectura. Tengo mis autores favoritos que me encantan y me inspiran un montón. Autores extranjeros y autores nacionales como Jorge Luis Borges, Roberto Arlt, Liliana Heker, entre muchos otros”, agregó. 



Al escucharla el litoral florece en melodías o en distintas voces. El amor también se respira en delicados sonidos que asoman en caricias distintas, “soy una persona romántica, vivo el amor de forma profunda y he publicado ya algunos libros – libritos – de poesía. Escribí un poema para homenajear a uno de mis escritores favoritos, Horacio Quiroga, entre tantos escritores favoritos que tengo”.


La yema de sus dedos apoya con delicadeza cada cuerda. Su voz está ensancha una melodía de verde soles. Sus lecturas de poesía y cuentos le salen por distintos poros. “Al componer me gusta jugar con la guitarra, dejarme llevar por los sonidos, mis composiciones nacen desde el corazón”, afirma y una sonrisa dibuja su sol.



viernes, 11 de abril de 2025

Daniela López: “Escribí esta obra para atravesar nuestras distintas formas de ver el mundo”


Hace una semana llegó a Corrientes la obra teatral
Archivo Elena, que cuenta con la actuación de la dramaturga Daniela López Giménez. Con ella charlamos después de la presentación, para conocer cómo nació esta historia y sus sensaciones con el público local.


Por Paulo Ferreyra



Archivo Elena es la biografía de una mujer, maestra, madre, esposa y abuela. A través de la memoria de su nieta nos llega el tránsito de las vicisitudes de una vida. El teatro creo un lazo de dos generaciones distintas. 


La obra teatral surgió de un festival que se hacía en Posadas, Misiones. El festival era Escena Sub30. En este festival invitaban a directores emergentes a realizar propuestas para el festival. En el momento de la convocatoria Daniela López estaba cuidando a su abuela, que se encontraba enferma y a quien ella asistía. 



Cuando la convocan al festival Daniela piensa qué podía contar y qué la estaba atravesando en lo personal, en ese contexto escucha un audio de su abuela - porque la grababa cada vez que hablaba - y ahí surgió la idea de exclamar en alto esa voz. 


“De alguna manera Archivo Elena me permitió sublimar todo eso que pasé con mi abuela y que es muy doloroso pero también fue hermoso al mismo tiempo”, cuenta. La voz de Daniela se rebalsa de brillo en los ojos. La dirección artística de la obra es de Laura Josefina Kramer, en el diseño y la operación de luces está Guillermo Echenique. El diseño sonoro es de Diego Kuchera.



— Al escribir esta obra pude despedirme de mi abuela y pude entender muchas cosas, como por ejemplo los abismos que separan una generación con otra. Entonces estas distancias a través del texto busqué subsanarla, entenderlo y abrazarlo. De esta forma también hice lo necesario para estrechar la historia de ella que al mismo tiempo es la historia de mi familia y la mía también. Haciendo y escribiendo la obra me di cuenta de que nuestra historia está emparentada con la historia de muchas familias de Misiones. Tenemos madres y abuelas que han sido maestras, maestras rurales, que han educado de alguna forma al país en épocas tan antiguas. Es un placer para mí que el arte me haya ayudado a despedirla y también a recordarla cada vez que me subo al escenario. 


— Hablaste de la historia familiar pero también aparecen hechos históricos de la provincia de Misiones y del país.


— Sucede que al escuchar su historia también entendía mucho la historia que nos rodea y nos define. La historia de nuestro país también nos define a nosotros y ha definido la historia de nuestras familias. Al mismo tiempo que iba reconstruyendo el relato de mi abuela veía que otros hechos se iban entrelazando con ella, con su memoria, con la memoria de nuestros antepasados. 


— ¿Cómo viviste la presentación en el Espacio Mariño?


— Me encantó. El público estuvo muy amoroso y muy respetuoso acá en Corrientes. Fue también muy conmovedor para mí porque es la primera vez que saco esta obra a otra provincia. Siempre la hice en Posadas y en otras localidades de la provincia de Misiones. Encontrar este recibimiento me conmueve mucho y estoy muy agradecida. 



— En la construcción artística de la obra teatral subyace un mensaje, volar, volar, volar. 


— Si, sobre todo porque me di cuente en la reconstrucción de la vida de mi abuela que se había privado de poder hacer lo que ella realmente tenía ganas. Siempre estaba un mandato por delante, cumplir los mandatos de la familia, los mandatos de ser mujer, entre muchos otros mandatos. Al escribir esta historia me enlacé de alguna manera con el deseo de ella, la veía - quizás la sigo viendo - contando ciertos hechos y pensando qué hubiera pasado si hubiera podido elegir otra cosa en su vida. 


Toda esa secuencia de hechos o episodios que algunos están en la obra de teatro me hicieron pensar como yo hoy puedo elegir qué hacer, qué estudiar, cómo desarrollarme, entre otras cosas. Esto fue muy lindo, escribí esta obra para transpolar y atravesar nuestras distintas formas de ver el mundo.


martes, 8 de abril de 2025

Micaela Vita: “El amor es la pulsión más grande de vida que tenemos”


Este fin de semana llega
Duratierra a la región. El viernes estarán en Resistencia y el domingo en Corrientes. La banda lleva más de veinte años juntos y hace un año editaron el disco A los amores - el folklórico Vol. 1. “Nos da mucha alegría poder llegar ahora estas provincias. Esta gira por el litoral nos tiene con ansiedad y con deseos, sobre todo para ver con quienes nos encontramos y qué sucede”, así expresó Micaela Vita en esta charla.

 

Por Paulo Ferreyra


“La única posible y fructífera misión del intelectual es estar con el pueblo, en el pueblo, principalmente en los momentos decisivos”, así escribió alguna vez el historiador, periodista e intelectual Osvaldo Bayer.

 

A los amores sí

que sí, que sí.

A los temores no

que no, que no.

A los ardores sí

paso derecho al pecho.

 

Así comienza la canción A los amores, segundo tema del disco que lleva este título. Duratierra con sus composiciones y sus creaciones también son los intelectuales de nuestro tiempo. Han creado un disco cargado de significado como hacía tiempo no escuchábamos en el folclore nacional. En los próximos días llegan a la región esta banda conformada por Micaela Vita, Juan Saraco, Valen Bonetto y Nico Arroyo. Para adelantar sobre esta gira, sobre el presente y sus canciones, hablamos días atrás con Micaela, donde con paciencia y cuidando cada expresión, respondió distintas preguntas.

 

— ¿Cómo es mirar al mundo desde esta perspectiva que propone Duratierra?

 

— Es precioso. Es muy reconfortante estar en este lugar porque es un regalo que vuelve a nosotros todo el tiempo. Es precioso percibir y transitar con la gente todo lo que le va pasando cuando llega a la trinchera de Duratierra. La gente encuentra aquí un espacio de pertenencia y otras personas que miran al mundo de forma similar, con las mismas intenciones de hacer las cosas mejor, con las mismas preocupaciones y las mismas denuncias en el cuerpo.

 

— El espacio del amor lejos del odio.

 

— Justamente es precioso porque es el lugar del amor. Es el espacio de esta mirada desde la ternura que hemos aprendido y que vamos edificando.

 

Con Duratierra hemos construido un espacio cultural muy fuerte de pertenencia ideológica. Es un espacio cuidado. Acá la gente se acerca porque necesita de ese abrazo. Hoy en día donde todo está tan hostil y donde los discursos de odio están más expandidos y llevados a acciones terroríficas, dramáticas y preocupantes, esto que hacemos es una contrapropuesta a ese mundo y es otra forma de construir.

 

Es muy gratificante y es muy emocionante también percibir que esta forma de mirar a través de la música que tiene esta banda se transforma en familia para mucha gente.


 

 

— Este acercamiento con el público se dio a lo largo de diferentes discos, ¿Trinchera fue el disco que les abrió más puertas?

 

 

— La transformación de la banda se dio a partir del disco Cría. A partir de este disco nos pasó que íbamos al concierto y nos encontrábamos con la gente que cantaba nuestras canciones. A partir de nuestras redes nos empezaban a llegar versiones de la gente tocando nuestros temas. Eso antes no nos había pasado. Eso fue algo que transformó la identidad de la banda. La consolidó en algún punto porque hacia ese lugar estábamos yendo y en ese lugar nos estábamos encontrando.

 

Empezó hacer un faro y una brújula hacia dónde ir. Buscamos esa emoción y esa conexión con la gente. A partir de Cría con la canción Marzo, Saravá, empezó a pasar la salida de aquello que nos transformaba en la sala de ensayo llegaba al corazón de mucha gente. Empezamos a palpar que nuestras letras y las canciones eran un lugar donde la gente elegía para sus días, un espacio para pensar, sentir y para expandir sus vivencias.

 

 

De la trinchera de Duratierra

 

En el 2020 la banda lanzó el disco Trinchera. Una palabra que no estaba en boca de todos como en estos momentos. Ahora la palabra y el concepto se expandieron, se la está usando un montón. En aquel tiempo incluso los seguidos tenían remeras con una frase de esta canción, “Y juntarse a doler / como gesto de rebeldía”.

 

El público que ya seguía las canciones de Duratierra tomó aquella canción para decir, soy parte de la trinchera. Después se transformó o se amplificó a la turba, “hoy en día nos pasa que nos topamos con gente en la calle que nos dice - soy de la turba. Hay algo ahí que se volvió una forma de nombrar a quienes nos reunimos alrededor de estas canciones”, agrega Micaela.

 

La banda estará el viernes 11 de abril en el Cecual, Resistencia, y el domingo 13 en el Espacio Mariño de Corrientes. Llegarán para presentar su más reciente disco, A los amores. Este es una material de profunda raíz folclórica.


 

Lo que los había reunido a Duratierra en sus comienzos fue el folclore. Después comenzaron a explorar y se permitieron moverse por fronteras más borrosas. Ahí también latía toda la música que somos y que también es parte de nuestro acervo cultural donde el paisaje sonoro entró a dialogar con la música folclórica.

 

Ahora con A los amores volvieron a la raíz más profunda, han creado un disco cargado de significado como hacía tiempo no escuchábamos en el folclore nacional. Lo grabaron con la vieja tecnología a cinta abierta. Se grabó con tomas en vivo y fue para ellos – según han comentado - una experiencia maravillosa.

 

La voz de Micaela llega pausada, reflexiva y conceptual, “Los discos te enseñan y te piden cosas que quizás no las tenés, sino que las tenés que ir a buscar. Este disco – A los amores – nos hizo crecer un montón a nivel artístico. Es algo que estábamos queriendo que suceda. Estos veinte años hicieron que lleguemos al disco de una buena manera y hemos cumplido un sueño como muchos otros”.

 

 

“Estas canciones parece que vinieron hechas con el mundo”

 

 

— ¿Cómo hacen para sostenerse como grupo durante más de veinte años? ¿Cuál es la clave para perdurar en esta forma?

 

— El amor es lo que nos sostiene. Es un amor con trabajo y con una intención de construcción. El amor tiene muchas formas y todas son maravillosas, este tiene como eje a la música. Es un amor que se siente en la mesa alrededor de la música y es una familia que se junta alrededor de esta mesa.

 

Hay varias claves. Una de ellas es que nos hemos ido acompañando a través de estos veinte años en los movimientos de la vida de cada quien, hemos ido respetando los procesos, los tiempos, hemos hecho terapia grupal que es una parte importante que hizo a esta revitalización de la banda con esta nueva formación de sexteto.

 

Hubo mucho de este proceso de acompañarse y de respetarse. Entendemos que llevamos adelante un proyecto colectivo y que al mismo tiempo es el eje de cada uno de nosotros. Esto no se puede construir de forma ficticia. Tener una banda es una decisión que requiere mucho trabajo y mucho compromiso. Somos una banda autogestiva y si bien hemos crecido bastante en estos años - eso hizo que mucha gente como Diego knoblovits, nuestro productor, se sume al proyecto. Todo el equipo que conforma Duratierra se va leudando, nosotros siete somos la fuerza activa, trabajamos mucho hace mucho tiempo y eso es tomar un compromiso y una decisión.

 

— En ese contexto se percibe ahí un cuidado con las palabras que nombran, ¿cuánta importancia le dan al trabajo con la palabra?

 

— Muchísima. En el trabajo de las canciones, en su mayoría están compuestas por Juan Saraco, que es el guitarrista de la banda. Hay otras canciones que son compartidas conmigo, otras solo mías y otras compartidas con Valen Bonetto, en este disco esta la primera canción que hizo Tomás Pagano, el bajista de la banda.

 

El darle valor a la palabra también fue un aprendizaje. Las letras en mi apreciación han ido yendo cada vez más profundas. Esa profundidad te da el hacer. Componer es un oficio como muchos otros oficios que requieren de mucho hacer para poder ir llegando de a poco a lugares donde a una les identifica.

 

Estas canciones que forman parte de A los amores a nivel compositivo son de un lugar muy alto de llegada, en la palabra, en la melodía y en la construcción. Siempre digo que este disco tiene canciones que parece que vinieron hechas con el mundo. No es fácil llegar a canciones o hacer canciones así que entren a la gente de este modo. Mi observación de verlo a Juan Saraco hacerlo es trabajar, trabajar y trabajar - buscar nuevas inspiraciones y viejas inspiraciones. Seguir trabajando, como un oficio para llegar a un lugar que nos de orgullo y que nos representa.

 

— En unos días más llegarán al litoral para traer justamente estas canciones, ¿cómo se sienten?

 

— Nos había quedo pendiente varias provincias del país con este trabajo de A los Amores, así que nos da mucha alegría poder llegar ahora estas provincias. Esta gira por el litoral nos tiene con ansiedad, con deseos, sobre todo para ver con quienes nos encontramos y qué sucede en el intercambio con los músicos locales. Queremos ver que nos pasa, hay que ir para ver qué pasa y poner el cuerpo. Tenemos mucha ilusión con esta gira.



 

El amor es una fuerza transformadora

 

Hay un punto donde el artista lleva sus canciones para mostrarlas. Pero también hay otro punto del camino del artista donde son las canciones las que lo llevan al artista a un lugar. En este último se encuentra Duratierra. Ahora son sus canciones – la demanda del público por escucharlas – quien comienza abrir nuevos escenarios. “Eso es preciosos”, describe Micaela. Es un signo de que la tarea está siendo llevada a buen puerto, cuando la banda, la música de la banda es lo que quieren escuchar. Es una de las tantas buenas señales de que Duratierra está yendo por el buen camino, es una conmoción muy grande para ellos cuando de repente aparece gente de lugares alejados de su cotidiano quienes les dicen que escuchan su música y que esa música los acompaña en diferentes momentos de sus vidas.

 

Duratierra llegará para cantar las canciones de A los amores. Podía detenerme en algunas de las canciones del disco pero, ya que estábamos hablando con Micaela le pregunté directamente qué es el amor para ella. Su voz llega clara y potente de vida, “el amor es la fuerza de transformación más grande que siento en mi vida. Es lo que va guiando los días, las elecciones, lo que me hace querer ser mejor en lo que hago. El amor a la música. El amor a los compañeros de proyectos. El amor a las crianzas. El amor a la tierra. El amor a la patria. El amor al país. Todo eso va conformando y guiando un poco el hacer y las decisiones que tomo en la vida. El amor es la pulsión más grande de vida que tenemos”.