Meses atrás el músico Jorge
Suligoy presentó en la ciudad de Resistencia y Posadas, su reciente
producción discográfica “Del Corazón
Guitarrero”. En esta entrevista
repasamos algunos conceptos que tiene este disco donde el músico subraya que la
siembra aún continúa. “La cosecha no es
un objetivo tan importante. Pero para gozo del corazón hay muchas cosas que
vamos recogiendo y cargando en las alforjas”, advierte
Por
paulo ferreyra especial para corrienteschamame.com
El músico Jorge Suligoy
estuvo recorriendo el Litoral presentando a la prensa y después al público en
general su disco “Del Corazón
Guitarrero”. En Corrientes el
Profesor Enrique Piñeyro resaltó la importancia de este disco para la música
chamamecera. “Suligoy tiene un don, pero
a su vez dona a los demás, ahí llega la traducción exacta de la emoción y el
sentimiento, lo que comúnmente llamamos la expresividad de Suligoy. El canto de Jorge Suligoy resume la vigencia
del viento, el viento es silencioso, el viento es invisible, el viento es para
quien lo quiera escuchar en el silencio”, advirtió.
-
Después de la presentación de tu reciente disco “Del Corazón Guitarrero”, ¿cómo
viviste cada encuentro con el público en Resistencia y Posadas?
Este disco “Del corazón guitarrero” ha marcado fuertemente a los
colegas y a los difusores que aprecian las formas elegidas. He recibido muchas expresiones de júbilo y de
aceptación. Un paisano me dijo – “no se
siente que falte el acordeón” - y eso es
todo un halago en sí mismo.
- ¿Cómo
nació y por qué concebiste un material discográfico apoyando toda la carga de
significados sobre la guitarra y tu voz?
Como digo cada vez que hablo del disco no hice más que exponer una
forma natural que tenemos de componer y compartir, siempre arrancamos con una
guitarra, a veces hay otros y sumamos, pero siempre es una al comenzar.
- Has
manifestado en más de una oportunidad que este disco es para escucharlo en la
intimidad, ¿cuál fue el criterio para elegir un repertorio que quepa en muchas
intimidades?
En realidad nunca lo pensé como una forma de que quepa en muchas
intimidades. Si asumí que estas canciones tan profundas, dolorosas,
maravillosas, no pueden interpretarse desde la locura marketinera de algunos
festivales o eventos populares. Estas
obras son para siempre. Es hora de que las cosas de la Cultura las manejen los
que aman estas cosas.
- En la
rueda de prensa en Corrientes Piñeyro dijo “Suligoy resume la vigencia del
viento”, ¿cómo es el viento de Suligoy o, qué dice el viento de Suligoy?
Fue conmovedor que un hombre tan importante de la ciencia
folklórica hablara así de mí. Porque además no habla solo de mí, habla de
Roberto Galarza, Atilio Puchot, Rodolfito Regúnaga, Cacho Saucedo, Gregorio
Molina, Bocha Sheridan. Él habla de los
que como el viento cada día de su vida ponemos en movimiento una pequeña masa
de energía, energía que hace cantar y hace bailar. Pero como el viento no
necesita de ninguna justificación, nosotros tampoco. Quién puede obviar un
tornado o un huracán, esos son los grandes de la música, pero también estamos
nosotros, los que recuperamos el valor de la brisa suave, que apenas acaricia,
pero que está, que fluye y es tan necesaria para distribuir el polen y
garantizar la perpetuidad efímera de las flores.-
-
Llevas muchos años con la música, ¿ha comenzado la etapa de cosechar lo que se
ha sembrado en tantos años con la música?
Puedo decir que hemos elegido no vivir una conciencia de plástico
y en un mundo prestadito. Somos dueños de estos sueños y no es que estemos en
contra del sistema, el sistema se ha empecinado en combatirnos.
No es fácil pero no es imposible. La siembra continúa. La cosecha no es un objetivo tan importante. Pero para gozo del corazón hay muchas cosas que vamos recogiendo y cargando en las alforjas. Entre esas cosas el cariño imprescindible de la gente, ñande gente.
No es fácil pero no es imposible. La siembra continúa. La cosecha no es un objetivo tan importante. Pero para gozo del corazón hay muchas cosas que vamos recogiendo y cargando en las alforjas. Entre esas cosas el cariño imprescindible de la gente, ñande gente.
- Por
último, te has definido como Obrero Cultural, eso significa de algún modo
trabajar siempre. ¿En qué estas trabajando ahora?
Lo de obrero es más que nada porque a veces estar en el escenario
o en los medios supone una conducta de estrella o de divo. Yo soy un cantor.
Como dicen Roberto y Rodolfo en su canción Cantor de mi tierra “La gente me mira con cierta ternura, yo soy
uno de ellos que se hizo cantor”. En
cuanto a lo que estamos pensando para el futuro puedo adelantar que estamos
trabajando en un proyecto que si Dios quiere, antes de septiembre pondremos a consideración
del pueblo chamamecero en Corrientes.
0 comentarios:
Publicar un comentario