Hoy viernes se realiza
la presentación del joven pianista Boris Giltburg
en el Teatro Vera de Corrientes. El
mismo estará acompañado por la Orquesta
Sinfónica de la Provincia de Corrientes dirigida por la Maestra Andrea Fusco. La directora de dicha orquesta subrayó que
este año ha sido muy intenso y que a lo largo de este tiempo siempre “se estuvo
innovando. Hemos trabajo mucho para
proponer cosas nuevas a los espectadores de la música”.
Por paulo ferreyra
La función estelar de Boris Giltburg junto a la Sinfónica
de Corrientes presenta algo inédito en Corrientes. “Por primera vez se realizará la obra
concierto No.2 de Shostakovich. Será una función imperdible en el cual el
pianista dejará un paisaje sonoro cargado de emociones”, resaltó la Mtra.
Andrea Fusco.
“Siempre estamos innovando y proponiendo cosas nuevas”,
comentó la Mtra. Andrea Fusco. “Durante
este tiempo fuimos creciendo, compartimos escenarios con artistas
internacionales y nacionales, hemos propuesto cosas novedosas como el espacio
de los jóvenes correntinos. La obra de
Hansel y Gretel tuvo gran repercusión del público presente. Como primicia
podemos adelantar que la apertura del Teatro Vera en el 2013 será con esta obra”,
remarcó la directora de la Orquesta Sinfónica de Corrientes.
“La creación o confección del programa de cada función de
la orquesta es un hecho creativo. Es un
hecho de búsqueda, definiciones, donde se escucha mucha música, un proceso
largo donde se define qué se quiere hacer y qué se puede hacer”, comentó la
Mtra. Andrea Fusco.
“Es un honor para nosotros poder presentar en el Teatro Vera
a uno de los máximos pianistas del mundo.
Giltburg es un músico que muy pocos tienen el privilegio de poder
disfrutar de sus ricas interpretaciones”, expresó el presidente del Instituto
de Cultura de la provincia Gabriel Romero.
Este joven pianista ruso es comparado con Sviatoslav Richter y Arthur
Rubinstein. En esta oportunidad llega a
Corrientes para presentar un concierto estelar denominado “Gala de época”.
Giltburg es un virtuoso pianista que logró trascendencia
internacional por sus destacadas interpretaciones de Beethoven, Schumann,
Ravel, Prokofiev y Rachmaninov, en los escenarios más importantes del mundo.
Luego de su debut con la Orquesta Filarmónica de Israel en 2005 y su
presentación decisiva con la Philharmonia en 2007, la carrera de Boris Giltburg
ascendió rápidamente convirtiéndose en un músico con una aguda sensibilidad,
combinando profundidad y poder. Su expresión y su sentido de la dinámica
armonizan perfectamente, creando un conjunto musical ejemplar, logrando liderar
a la orquesta con su interpretación, resultando en una impresión maravillosa.
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