Por paulo ferreyra
[email protected]
Por estos días se estrenó en Buenos Aires Ramón Ayala el documental. La ópera prima de Marcos Gómez recorre la vida del músico misionero, autor de clásicos del folclore como El jangadero, Posadeña linda, El cosechero, El mensú, El cachapecero, entre tantos otros. En este documental participan Juan Falú, Liliana Herrero y el “Tata” Cedrón, Joselo Schuap, Cacho Bernal, quienes de alguna forma hacen un homenaje a Ramón Ayala. “Creo que el folclore del litoral sigue estando en la periferia. Ramón le pregunta a los vendedores de discos truchos si lo conocen. Muchos dicen que no pero son capaces de tararear sus canciones. Ni los técnicos, ni los sonidistas, ni los camarógrafos sabían quien era”, confiesa Marcos Gómez.
Ramón Ayala habla pausado. La comunicación telefónica se hace larga. Hay silencios, el espera y de este lado del teléfono también se espera. “Hay que celebrar porque nos sentimos vivos. Las personas deberían hablar más de las cosas que le hacen bien y celebrar la vida. El amor es el mejor estado del hombre”, sentencia.
El músico y poeta confiesa que lo que esta viviendo es un trago dulce de la vida. “Hay que volver la mirada sobre nuestra identidad, sus sabores, sus olores, su poesía, sus colores. Todo esto es muy importante para hacerse fuerte ante el avance de las cosas de afuera que nos llegas hoy con la tecnología”. Por último Ramón Ayala subraya que los rostros del pueblo deben ser velados y cuidados “por el pueblo y por sus gobiernos”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario