Por paulo ferreyra
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Cerca de las 22 horas del día sábado abrió su fuelle Mauro Bonamino y la música retozó por el cuerpo chamamecero. Los de Imaguaré presentaron su espectáculo “Alma de Calandria” en el Teatro Vera. Como cada año el grupo cierra simbólicamente su año realizando una actuación en el prestigioso Teatro Vera, en esta oportunidad con un acompañamiento importante por parte del público que colmó la sala. “En esta oportunidad ofrecimos al público temas de los primeros años de Imaguaré que hace tiempo no interpretamos. Fue una noche intensa rodeados de nuevos valores y del calor de la gente”, resaltó Julio Cáceres.
Los temas fueron pasando como “trasnochado”, “Pe hendusero”, “Alma de calandria”, “Otoño en mi pueblo”, “Mercedes de mis abuelos”, “Serata”, “Verano en tu piel” entre tantos otros. Los de Imaguaré estuvieron conformados por Mauro Bonamino en Acordeón, Fabio Acevedo en Guitarra, Fernando Soto en Guitarra, Juan Mora en piano y Alejandro Mendoza en Bajo. Las voces a cargo de Federico Cáceres, Nicolás Cáceres y Julio Cáceres.
El telón bajón y dio paso a Laura Tribbia quien ofició de presentadora en esta noche larga e intensa. Cuando el telón subió apareció Jhosemir Mino, el primer invitado de la noche, después le siguió Franco Perroni y la pequeña de todos Jorgelina Espíndola. Durante toda la noche la presencia de la danza fue muy fuerte, hubo espacio para la danza clásica chamamecera y también para la danza contemporánea.
En el balcón del paraíso hubo colgada una bandera, tanto en cazuela como en paraíso el público vivó el espectáculo de pie, aplaudió y se abrió en un sapukái. Había algunos chicos que caminaban por las galerías, sobre la última línea de la platea había una nena que miraba todo subida caballito en los hombros de su padre. En las pausas o mientras cantaban los invitados Julio Cáceres descansaba, Lidia Pascua – su esposa, lo peinaba, le ofrecía agua y aliento.
Sobre el final de la vela hubo un reconocimiento para Juan Pico Núñez, quien junto a su hermano Marcos Núñez ha recorrido gran parte del país y llevó su música a otros países de Europa. “Este espectáculo se llamó Alma de Calandria” porque tratamos justamente de rememorar aquel pueblo natal, Mercedes, pasó el tiempo pero todo está grabado en la memoria y en la sangre de Imaguaré”, resaltó Julio Cáceres.
Para el cierre llegaron los clásicos como “Nuestros sueños y la distancia”, “Ciudad de Mercedes”, “Avio del Alma”, “Compadre que tiene el vino” y un cierre total con “Kilómetro 11” donde cantaron todos. Como rezaba el programa de “Los de Imaguaré” fue una noche plena de música, danzas, poemas y canciones. El alma adobada por revivir la cultura floreció en la alegría del público al salir del gran Coliseo del Teatro Vera.
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