“La crónica universal e íntima en el Cecual”

Este fin de semana se realizó el “Festival Cecualero de Crónicas” en Resistencia, Chaco. En la oportunidad estuvieron Marcelo Caparra, Mario Caparra, Mario Anic, Cecilia Lis García, Marcelo Nieto, Víctor del Val, Pablo Black, entre otros. Hubo intervención musical tanto el viernes como el sábado, si bien el acompañamiento del público se vio apagado por el frío o vaya a saber por qué designio de la vida, las jornadas fueron un auténtico encuentro con la palabra. Como se trataba del “festival de crónicas” aquí un intento por contar lo sucedido con imágenes y palabras.

Por paulo ferreyra
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Al llegar al Cecual uno encuentro buen clima, música y un espacio intimista abierto. Este viernes último el Festival de Crónicas comenzó cerca de las 21 horas con la intervención de los hermanos Caparra hablando sobre la muestra “Fervores de Resistencia”. Había fotos y textos especialmente elegidos para la ocasión.

“La crónica que nos gusta es aquella que logra ser universal e intima a la vez. Donde podemos palpar un compromiso con la forma”, expresó Alejandro Caparra. “Quizás coincidan conmigo que aquí tenemos muchas resistencia, no podemos hablar de una sola resistencia”, expresó y después leyó algunos de los textos que acompañaban a las fotos.

Alejandro Caparra realizó charlas itinerantes por la ciudad y parte de su experiencia las volcó en este Festival de Crónicas, además nombró a varios autores referentes de la crónica en Resistencia. Parte de su auditorio estábamos parados en forma de medio circulo frente a las fotos. Alejandro en varias oportunidades hizo alusión a que esto era casi una reunión de familia e hizo varias referencia a su madre, quien era la única que estaba sentada, vestida de saco negro y brazos cruzados. Ante cada referencia su madre regalaba una sonrisa a quienes la buscábamos. Después fue el turno de Mario Caparra quien habló sobre la fotografía.

La intervención de Mario Anic y Cecilia Lis García fue puntualmente para hablar sobre “El Che y los Beatnik”. Antes de comenzar la charla se agradeció a quienes mandaron crónicas al facebook para calentar el clima del festival y fueron publicadas durante la semana previa. Mario Anic y Cecilia Lis García explicaron quienes fueron los beatnik, “el gran valor que tenían los beatnik era la intuición. El contacto con el otro y las crónicas de viajes son los puntos importantes. El diario del che – por ejemplo – es una viaje mágico. En los viajes, en la intuición y en el contacto con el otro esta el punto de lazo entre el Che y los Beatnik”.

El frío iba ganando la noche, sin embargo entre el público corría cerveza y vino. La mayoría estaba con los brazos cruzados o directamente con las manos en los bolsillos, muy pocos comen algo. En el fondo del patio cecualero, donde la luz llega muy a regañadientes o no llega, los cigarrillos iluminan algunos rostros que desafían una sonrisa. La conexión entre el Che y los Beatnik “fueron los viajes, la manera en que vivieron intensamente cada viaje, cada uno a su forma y a su estilo de vida. Todo eso fue transferido a la palabra y ese es el punto de unión”.

El bondi de Seba y Patricio

El final de la jornada de viernes fue una intervención excepcional de Seba Ibarra y Patricio Hermosilla, además de unos cuantos pasajeros que deleitaron al público con las “crónicas” del viaje en bondi. Fueron canciones hechas crónicas donde el texto jugo con las canciones de Seba Ibarra. Los texto leídos le dieron calor a la noche, los rostros ahora se iluminaban con sonrisas amplias y algunas hasta estridentes. Las crónicas del bondi no fueron otra cosa que el relato de lo que vivimos quienes usamos con frecuencia el bondi. “El chofer chaman de calles y avenidas”, “el chofer coreógrafo – un pasito más atrás”, “el chofer creyente – en el fondo hay lugar – y los pasajeros ateos por apretujados”, sería imposible transcribir todas las palabras. Alcanzará quizás con escribir que al regresar subí al bondi Chaco – Corrientes, 23.20, viaje parado, al fondo, con un “convidador de música”, “con la chica linda lejos de mi”, con el aire frío de una ventana rebelde que nunca logramos cerrar. Llegamos al puente y había demoras, llegamos al puerto de Corrientes a las 1.35 del día sábado, más de dos horas en bondi.

Tissera

El día sábado Elizabaht Bergallo debía hablar sobre la comida como relato en una comunidad pero su estado de salud le imposibilidad llegarse hasta el Cecual. La actividad comenzó entonces con la mesa sobre Crónicas trágicas del Chaco, con Marcelo Nieto, Víctor del Val y Pablo Black quienes hablaron en torno a un libro de Ramón de las Mercedes Tissera.

“Tissera es de los autores que hay que leer. Forma parte del canon. Tissera es un periodista profuso. Tenía una gran pasión por la escritura, si él no tenía un dato lo inventa, ahí entraba en juego la literatura”. Víctor del Val trabajó con Tissera y destacó la “capacidad de novelar la historia del Chaco”.

El sábado la jornada iba a concluir con Hip Hop Crónico de la mano Alan Nolek, Uli Gómez y Lucas Monzón. La cerveza comenzó a circular más temprano, el silencio en el público era tan profundo que por momentos los motores de los autores y bondis de la calle se colaban en el patio. El Festival Cecualero de Crónicos dejó nuevamente un autentico encuentro con la palabra escrita, donde los viejos y nuevos cronistas de Resistencia revolotearon durante dos jornadas intensas.