“En el camino musical hay una fuerza interior, el artista tiene una fuerza interior que no sabe explicar y que lo sostiene en los momentos difíciles”, cuenta en esta charla Quique Maidana. El cantor chamamecero ha editado dos discos, “como siempre fui” y “mi canto sin tiempo”, hablamos de estos temas y otras cuestiones, como por ejemplo qué deben tener los difusores chamameceros – un pequeño llamado de atención.
por paulo ferreyra
[email protected]
“Me dí cuenta que la música despertaba cosas en mí a los 13 o 14 años, comenzaba a cantar y mis compañeros me alentaban. En la escuela me destapé”, así comienza la charla con Quique Maidana. Desde Esquina, Corrientes pasó a trabajar como maestro al Chaco y aprendió a tocar la guitarra, en Corrientes Capital comenzó a trabajar públicamente con la música de la mano del pianista Enrique Aguilera.
Con la música Quique Maidana ha recorrido toda la región, en distintos festivales importantes ha obtenido premios y distinciones. En la charla hace una pausa, escudriña a su entrevistador con la mirada y finalmente expresa que ha tenido en la vida varios oficios pero la música siempre estuvo presente, recién en el 2014 pudo ingresar a la Fiesta Nacional del Chamame.
En su larga trayectoria Quique grabó el disco “como siempre fui” donde Martín “tripa” Rodríguez armó el disco, “quería hacer un tributo a los amigos y regalarle algo a quienes me alentaron en estos años de camino musical. En el segundo disco ya cambiamos algunas cosas, la masterización se hizo en Buenos Aires y anduvo muy bien, este segundo disco lleva por título “mi canto sin tiempo”.
“Hoy me siento con la voz firme y clara. En este disco de “mi canto sin tiempo” plasmo la realidad de que el canto no tiene tiempo, no canto canciones de una sola época, yo canto chamame de todos los tiempos. Ahora me acompañan músicos jóvenes de Esquina, me estoy presentando en diferentes lugares de la ciudad de Corrientes, es difícil porque el músico hoy tiene que venderse y eso me cuesta un poco”, cuenta.
“En el camino musical hay una fuerza interior, el artista tiene una fuerza interior que no sabe explicar y que lo sostiene en los momentos difíciles. Yo no puedo dejar de cantar, seguiré cantando porque tengo esa fuerza interior, mi alimento está en el encuentro con los amigos y en los discos que están caminando. El chamame me despierta emociones y ganas de cantar”, resalta Quiqui Maidana.
El chamame tiene esencia y correntinidad
“El chamame tiene que evolucionar, no se puede quedar con lo que hicieron los pioneros del chamame, tiene que evolucionar”, afirma Quique Maidana. “El chamame tiene una esencia y una correntinidad, tiene sangre adentro, vos cuando escuchar un buen chamame tiene que despertar ganas de dar un sapukái, bailar, tomar un vino, cantar, la correntinidad se despierta con un buen chamame. Cuando escuchamos alguna música que no despierta estos sentimientos o emociones probablemente no sea chamame”.
“Difusores comprometidos”
En la charla Quique Maidana tuvo palabras de altos elogios para los jóvenes músicos que hoy están grabando disco y componiendo. Sin embargo hizo un llamado a los difusores de la música a comprometerse mas con su labor, “los medios ayudan a la difusión. Hoy los músicos tenemos que vendernos para que nos difundan, esta tarea se hace muy difícil de llevar a cabo cuando algunos no escuchan a los intérpretes, porque en algunos casos si le caes bien te pasan y sino estas afuera. Los difusores tienen que ser un poco más comprometidos con su tarea y salir a busca, indagar, informarse, sino vamos a estar siempre con los mismos artistas”, resaltó.
por paulo ferreyra
[email protected]
“Me dí cuenta que la música despertaba cosas en mí a los 13 o 14 años, comenzaba a cantar y mis compañeros me alentaban. En la escuela me destapé”, así comienza la charla con Quique Maidana. Desde Esquina, Corrientes pasó a trabajar como maestro al Chaco y aprendió a tocar la guitarra, en Corrientes Capital comenzó a trabajar públicamente con la música de la mano del pianista Enrique Aguilera.
Quique Maidana |
En su larga trayectoria Quique grabó el disco “como siempre fui” donde Martín “tripa” Rodríguez armó el disco, “quería hacer un tributo a los amigos y regalarle algo a quienes me alentaron en estos años de camino musical. En el segundo disco ya cambiamos algunas cosas, la masterización se hizo en Buenos Aires y anduvo muy bien, este segundo disco lleva por título “mi canto sin tiempo”.
“Hoy me siento con la voz firme y clara. En este disco de “mi canto sin tiempo” plasmo la realidad de que el canto no tiene tiempo, no canto canciones de una sola época, yo canto chamame de todos los tiempos. Ahora me acompañan músicos jóvenes de Esquina, me estoy presentando en diferentes lugares de la ciudad de Corrientes, es difícil porque el músico hoy tiene que venderse y eso me cuesta un poco”, cuenta.
“En el camino musical hay una fuerza interior, el artista tiene una fuerza interior que no sabe explicar y que lo sostiene en los momentos difíciles. Yo no puedo dejar de cantar, seguiré cantando porque tengo esa fuerza interior, mi alimento está en el encuentro con los amigos y en los discos que están caminando. El chamame me despierta emociones y ganas de cantar”, resalta Quiqui Maidana.
El chamame tiene esencia y correntinidad
“El chamame tiene que evolucionar, no se puede quedar con lo que hicieron los pioneros del chamame, tiene que evolucionar”, afirma Quique Maidana. “El chamame tiene una esencia y una correntinidad, tiene sangre adentro, vos cuando escuchar un buen chamame tiene que despertar ganas de dar un sapukái, bailar, tomar un vino, cantar, la correntinidad se despierta con un buen chamame. Cuando escuchamos alguna música que no despierta estos sentimientos o emociones probablemente no sea chamame”.
“Difusores comprometidos”
En la charla Quique Maidana tuvo palabras de altos elogios para los jóvenes músicos que hoy están grabando disco y componiendo. Sin embargo hizo un llamado a los difusores de la música a comprometerse mas con su labor, “los medios ayudan a la difusión. Hoy los músicos tenemos que vendernos para que nos difundan, esta tarea se hace muy difícil de llevar a cabo cuando algunos no escuchan a los intérpretes, porque en algunos casos si le caes bien te pasan y sino estas afuera. Los difusores tienen que ser un poco más comprometidos con su tarea y salir a busca, indagar, informarse, sino vamos a estar siempre con los mismos artistas”, resaltó.