por paulo ferreyra
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Con un marco de público importante, el Hall del Hospital Pediátrico “Juan Pablo II” se vió desbordado por pacientes, familiares, músicos y público en general. Cerca del medio día comenzó la actividad del Chamame Solidario en el lugar con la presencia de Jorgelina Espíndola, “me siento contenta y agradecida de poder cantar en este lugar”, expresó. Con un repertorio clásico Jorgelina invitó a muchos a bailar y el Ballet del Museo de Artesanías desplegó sus aires bailarines regados por el aplauso del público.
La segunda propuesta musical tuvo a Mauro Bonamino quien presentó temas propios y clásicos del género. Seguidamente el grupo Imaguaré, comandado por Julio y Nicolas Cáceres revivieron toda la pujanza y fortaleza del chamame. El público presente aplaudía cada tema con gran entusiasmo, había carteles con nombres de algunos chicos y una niña mostraba orgullosa sus palabras escrita a tropezones, “te quiero corrientes”. Los celulares se elevaban para registrar todo, algunos se acercaron para sacarte fotos con Julio Cáceres mientras el intentaba refrescarse tras el intenso calor vivido en su presentación.
“El Chamame Solidario forma parte de la Fiesta Nacional del Chamame. El Gobierno de la Provincia trabaja para llegar a todos, esto es una celebración de los correntinos y aquí tenemos el objetivo de que todos forman parte de esta celebración. Aquí hay chicos internados, familiares que no se pueden desplazar hasta el Anfiteatro y el personal del hospital que trabaja incansablemente por la salud de los niños. Nosotros construimos herramientas para acercarnos a todos ellos”, resaltó Eduardo Sivori, director de Artes Escénica, Música y Artes Audiovisuales. Por su parte Susana Glinka, directa Asociada Médica del Hospital Pediátrico resaltó que se sentía feliz por la convocatoria del Chamame Solidario. “A los chicos que podían salir se los acercó hasta el balcón para que observen a estos músicos chamameceros. Estamos feliz por esta convocatoria y por todo lo que trae la música al hospital”, expresó Susana Glinka.
Guaranítica cerró la propuesta musical de la mañana. El baile de la mano del Ballet del Museo de Artesanías estuvo presente con gran vitalidad, las movimientos del cuerpo se extendía como la luz del rayo en el horizonte. Desde sus sillas muchos chicos observan en silencio mientras sus manos se agitan al ritmo de la música. Los padres o familiares no cesan de sacar fotos con los celulares. La actividad se extendió por más de una hora donde hubo música, baile y poesía chamamecera.
Con un marco de público importante, el Hall del Hospital Pediátrico “Juan Pablo II” se vió desbordado por pacientes, familiares, músicos y público en general. Cerca del medio día comenzó la actividad del Chamame Solidario en el lugar con la presencia de Jorgelina Espíndola, “me siento contenta y agradecida de poder cantar en este lugar”, expresó. Con un repertorio clásico Jorgelina invitó a muchos a bailar y el Ballet del Museo de Artesanías desplegó sus aires bailarines regados por el aplauso del público.
La segunda propuesta musical tuvo a Mauro Bonamino quien presentó temas propios y clásicos del género. Seguidamente el grupo Imaguaré, comandado por Julio y Nicolas Cáceres revivieron toda la pujanza y fortaleza del chamame. El público presente aplaudía cada tema con gran entusiasmo, había carteles con nombres de algunos chicos y una niña mostraba orgullosa sus palabras escrita a tropezones, “te quiero corrientes”. Los celulares se elevaban para registrar todo, algunos se acercaron para sacarte fotos con Julio Cáceres mientras el intentaba refrescarse tras el intenso calor vivido en su presentación.
“El Chamame Solidario forma parte de la Fiesta Nacional del Chamame. El Gobierno de la Provincia trabaja para llegar a todos, esto es una celebración de los correntinos y aquí tenemos el objetivo de que todos forman parte de esta celebración. Aquí hay chicos internados, familiares que no se pueden desplazar hasta el Anfiteatro y el personal del hospital que trabaja incansablemente por la salud de los niños. Nosotros construimos herramientas para acercarnos a todos ellos”, resaltó Eduardo Sivori, director de Artes Escénica, Música y Artes Audiovisuales. Por su parte Susana Glinka, directa Asociada Médica del Hospital Pediátrico resaltó que se sentía feliz por la convocatoria del Chamame Solidario. “A los chicos que podían salir se los acercó hasta el balcón para que observen a estos músicos chamameceros. Estamos feliz por esta convocatoria y por todo lo que trae la música al hospital”, expresó Susana Glinka.
Guaranítica cerró la propuesta musical de la mañana. El baile de la mano del Ballet del Museo de Artesanías estuvo presente con gran vitalidad, las movimientos del cuerpo se extendía como la luz del rayo en el horizonte. Desde sus sillas muchos chicos observan en silencio mientras sus manos se agitan al ritmo de la música. Los padres o familiares no cesan de sacar fotos con los celulares. La actividad se extendió por más de una hora donde hubo música, baile y poesía chamamecera.
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