miércoles, 20 de marzo de 2019

Rocío Navarro: “La poesía respira al ritmo de cada escritora”

En el día de la poesía Rocío Navarro cuenta cómo empezó a escribir, qué está leyendo en estos momentos y qué busca como lectora. “Lo que escribo es muy biográfico, no necesariamente porque surja del anécdota personal pero viene de cuestiones que me movilizan. Hay que entender que habitamos un espacio, un paisaje, un horizonte histórico que necesariamente nos interpela. La poesía respira al ritmo de cada escritora”, explica.


paulo ferreyra
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La imagino a ella llegando al estacionamiento bajo los árboles del campus de la Unne en Resistencia. El sol se va despidiendo de las copas verdes y del frío cemento. Hace calor. Ella lleva consigo un bolso y deja a mano una paquete de cigarrillos y el encendedor.


“Empecé a escribir como algo natural. Bastante natural y con poca conciencia. En realidad no termino de considerarme ni poeta, ni escritora, más bien soy alguien que eventualmente escribe sin pensar demasiado en los géneros. Eso no significa que no piense o no cuide la palabra. Le pongo dedicación a mis torpes intentos por transmitir cosas”, explica.


Rocío Navarro nació en Las Breñas. Es docente, periodista y fotógrafa. Publicó Casandra Cactus (Cospel, Resistencia, 2007), Inhalar resistir expirar (Ñasaindy Cartonera, Formosa, 2010) y Mi jardín salvaje (autoedición, Resistencia, 2016). Además ha participado de distintas antologías.

Al inicio de la charla insiste en que hay más personas autorizadas en materia poética en el Chaco. Después hace una pausa y cuenta, “abordé la escritura como todos, por un lado por la necesidad de expresar algunas ideas, sensaciones y al mismo tiempo seducida por las cosas que encontraba en la escritura. Había algo ahí en el proceso creativo y en el texto compartido que no encontré en otra herramienta de expresión.



Escucho casi sin respirar, de repente hay una pausa.

— “¿Estás ahí?”, me pregunta del otro lado del teléfono.

— Sí, estoy acá, le respondo.


Hago silencio, la escucho. La comunicación a distancia a veces tiene estas cosas, uno se pierde las reacciones, los gestos, las miradas, la atención tanto de quien contesta como quien escucha.


“Así más o menos fue como empecé. Como todos”, continúa ahora respondiendo las pregunta de cómo inició este camino de escritora. “Creo que con mayor conciencia empecé a escribir cuando inicié la carrera de periodismo. Desde este lugar reivindico esta cuestión de no preocuparse tanto por los géneros más allá de las cuestiones lógicas de la escritura. Hay que tener en claro qué buscamos transmitir o decir”.


— ¿Cómo lectora en qué género te sentís más cómoda?

Ahí también soy totalmente anárquica. Leo mucha no ficción y crónica, es un género que me gusta mucho leer y estudiar. Practiqué poco. Leo poesía y novela. Los cuentos me cuestan leer, no he profundizado tanto en ese género. Pero leo muy variado.


— A ver, démosle un orden a esa variedad, ¿qué hay hoy en tu mesita de luz?


En este momento hay una antología poética de Diana Bellessi, al lado de un libro de Carlos Busquet, Magnetizado. Además hay otro de poesía de Martín Armada. Me gusta mucho leer a la gente de mi generación. Esos son los libros que me acuerdo ahora.

Siempre leo varias cosas al mismo tiempo. Hay semanas o etapas donde leo mucho, después me tomo recreo de lectura. Igual hoy estamos todo el tiempo estamos leyendo a través de internet. Sin embargo del ritual de leer el libro a veces descanso.


— De ese ritual, ¿qué tiene de especial la lectura de poesía?

Para mí lo que tiene de específico la escritura de la poesía es un tiempo diferente a la narrativa, mucho más vinculada a la intimidad y a la respiración propia de cada escritor. Me parece que es un espacio necesario en algunas cuestiones. Es un momento también para pasar de la hiperconexión a una soledad con la poesía.

— Partiendo desde ese espacio de intimidad, ¿escribís sólo desde la experiencia o cuestiones sociales también despiertan poemas?

Lo que escribo es muy biográfico, no necesariamente porque surja de la anécdota personal pero viene de cuestiones que me movilizan. Hay que entender que habitamos un espacio, un paisaje, un horizonte histórico que necesariamente nos interpela. Nosotros somos finalmente una mezcla extraña que surge entre lo íntimo y lo social. Esto se extiende a una frase propia del feminismo: lo personal es político.

— Tanto de lo que lees como de lo que escribís, ¿qué buscas con esos textos?

Los textos no son panfletarios. Está bien cuando marcan una postura. Me gusta el texto cuando no me engatusa para que piense algo determinado. Me seducen los libros cuando narran una experiencia o una impresión del mundo, con la cual yo puedo comulgar o disentir y eso me resulta agradable y respetable para que le dedique mi tiempo. Si el texto me deja con una pregunta mejor. Si me sirve para reforzar algo que pienso también está bueno y si hay que disentir disentimos pero no desde el lugar de bajada de línea.


ASÍ ESCRIBE ROCÍONAVARRO

Escribir

Escribir hasta que duela. O hasta que alivie. Escribir incluso mientras no se está garabateando o tipeando (esto es: escribiendo). Vivir para escribir porque el registro es, a la fecha, el mejor boleto en la lotería de que alguien (sino al menos uno mismo) nos comprenda. Ser palabra con el cuerpo.

Hoy pulgar derecho se despertó vocal; más precisamente i. Es una i amarilla como la yema o los choclos del almuerzo. Masticar palabras con los oídos. La ciudad está llena de imágenes. Que a los ojos les arda el movimiento orgásmico de la mano y que la nariz ya no soporte el hollín de las letras de aquel despanzurrado libraco. Sea cual fuere.

Que cuando agotada me hunda en el lodo azul de lo onírico, los fantasmas de otros escribas llenen mis orejas de alfileres con oraciones. Que me despierte porque un pinchazo vino a confirmarme que aún muerta he de padecer este impulso insaciable: He de seguir siendo palabra. Aún muerta.


ahora, la casa

la casa no huele a (tantos) cigarrillos
me miran las paredes sorprendidas
y chismean a mis espaldas sobre tu ausencia.
la casa está impregnada de sahumerios
los muebles parecen más alargados
y me sonríen con disimulo, equilibrados.
ahora que sólo yo,
que ya no vos,
la casa está impecable,
y así parece más de catálogo
y menos de hogar.

jueves, 14 de marzo de 2019

Julio Regúnaga presenta Des – Concierto


“Voy a comenzar solo. Tocaré la guitarra y cantaré unos temas, y después se sumarán los amigos”, explica Julio Regúnaga sobre su presentación de esta noche en El Mariscal. La cita es a partir de las 23. “Será una noche bastante ecléctica e intimista. Estarán también Gabriel Bestoso y Alejandro Ledesma, y el sonido, bajo la dirección del gran Raúl Díaz. 


paulo ferreyra
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Esta es la primera vez que Julio Regúnaga se presentará como solista en la ciudad de Corrientes. Ha acompañado y trabajado con diferentes orquestas y músicos de la ciudad, sin embargo este será su primer paso como solista. “Es un regreso con todo para compartir con la gurisada. Es un regreso con todo, con todo”, insiste.


“Estoy de vuelta para compartir con la gente del barrio, del Barrio Balboa. Ahora se me ocurrió desarrollar en El Mariscal la música que vengo tocando en la intimidad. En la apertura tocaré temas de Antonio Carlos Jobim, después vamos hacer boleros y temas melódicos. Esa es la propuesta”, subraya.

“Jobim me formó musicalmente sin haberlo conocido. Pero puedo decir que escuché su música toda mi vida y me abrió mucho la cabeza musicalmente. Creo que a muchos les abrió la cabeza. Jobim es el Piazzolla de Brasil”, advierte.

Julio estuvo con la orquesta folclórica de la provincia de Corrientes entre ocho o nueve años. “Durante estos años acompañé a mucha gente, grabé con muchos músicos, también hice arreglos en los discos de Los Alonsitos, Alan Guillén, Mirian Asuad, Lucas Segovia. He arreglado temas para Imaguaré, Reencuentro, Mario Bofill. Hice muchas cosas en Corrientes y recorrí diferentes escenarios en la provincia y la región. Ahora esta presentación será el puntapié para iniciar un camino solista”, cuenta entusiasmado y ahora las palabras le llueven correntosas.

“El show se llama Des-concierto porque la idea es que después de la primera parte que está bien armada vendrán amigos a ofrecer chamamé y otros ritmos. Tenemos muchas ganas de tocar. La intención es que sea así, des-concierto. Dependerá también de los amigos que estén presentes. Voy a cantar algunos tangos, algunos temas que me hacen acordar a mi viejo que fue fundamental en mí vida. Al Kutu, mi viejo, lo acompañaba desde chiquito”.

Por internet aún se consigue una jukebox, también conocida en castellano como sinfonola, gramola o rocola. Es una máquina que se opera introduciendo monedas o billetes y que permite seleccionar canciones de diferentes estilos. Julio en parte se define así, “soy una rocola”, expresa y sonríe ampliamente. “Te acompaño con el tema que sea. Estoy preparado para todo”, cuenta. “Vos me decís un tema y yo acompaño. Será tan amplia la velada del viernes que tocaré temas que me gustan mucho del Cuchi Leguizamón”, agrega.

Disco de chamamé

Regúnaga adelantó que está trabajando en la grabación de un disco de chamamé con clásicos y temas propios. “El material saldrá para agosto o septiembre del presente año, y la producción del disco estará en manos de Antonio Tarragó Ros”, adelantó.

viernes, 8 de marzo de 2019

Agustina: “La poesía es hoy una herramienta necesaria”

Esta tarde a las 20 Agustina Wischnivetzky presentará su poemario. Será en la Sala del Sol del Centro Cultural Universitario de la Unne, Córdoba esquina 9 de julio, Corrientes. “A la poesía llegué porque fue el canal expresivo que encontré o que nació quizás de un silencio que me inundaba. Después se fue volviendo casi un ejercicio cotidiano, un juego y últimamente es una herramienta necesaria”, cuenta. Además anticipa aquí dos poemas de su creación.

Paulo Ferreyra

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Agustina Wischnivetzky es estudiante de la licenciatura en Artes Combinadas en la Unne. Escribe poesía, realiza videos y performance. En 2015 publicó el poemario “En las grietas de mi lengua”. En 2017, junto a Katharina Saporitti, realizó “Cuerpxs que no importan” una obra interactiva y performática llevada a cabo en tres ocasiones en Chaco y Corrientes. En 2018 realizó un intercambio estudiantil en Porto Alegre, Brasil. Allí produjo videopoesía, videoperformance y grabado, siendo de este último formato la obra “Entropía das linguas” parte de una muestra colectiva del Núcleo de Arte Impresso (NAI). Actualmente edita el poemario “Pequeño cuerpo diurno”.



Sobre su obra “Queridx cuerpx” expresa: Un cuerpo recibió cartas durante años. La última fue en 2017. ¿Hace falta más que silencio para responder? ¿hace falta responder? Quizás sí. Ahora, un cuerpo encarna esas cartas, las reconoce, las recibe, responde. Lleva tierra como piel. Un cuerpo presenta al poemario y se presenta. Entrega versos a otros cuerpos, porque “habrá que despedirlas/ enterrarlas/ llenarle de flores los ojos” para habitar las palabras, es decir, habitarse.

Su voz es dulce. A veces cuando caminamos por los patios, la ropa tendida llega a nosotros por el viento, sin querer y como un caria, nos toca y se ve. Así son las palabras que salen de su boca, una acaricia que viene y se va. Sonríe como el sol, blanco y luminoso.


— Que autores te sedujeron.
Se me vienen a la mente personas que conozco, algunas que publican y otras que no. Hay una cantidad de autorxs locales y de alrededores, como Franco Rivero, María Laura Riba, Claudia Massin, Alicia Genovese, Evelín Bochle, María Bakun, Diana Bellessi. También Juarróz, Irene Gruss, Clarice Lispector, Juan Gelman, Idea Vilariño y más.

— ¿En la construcción de la poética donde pones la fuerza?, en lo que vas a decir, en la forma, en las palabras, ¿por qué?
Creo que un poco en la imagen pero aún más en el ritmo, me gusta percibirlo como una canción. Me gusta leerlo en voz alta hasta lograr cierta fluidez que te lleve sin esfuerzo a recorrer el poema. Esta búsqueda suele darse bastante en lo posterior al primer escrito donde se puede jugar con las tantas posibilidades que tenemos de usar las palabras y jugar también en cómo colocarlas.


— Podemos hacer un adelante y en lugar de escucharte, leer algo de tu poesía ahora.



Si, claro



del poemario “Queridx cuerpx" 







entiendo 

si te enamoraste de la quietud si te construiste una casa 

a base de silencio entiendo 

si querés hundirte 

si no podés permanecer entiendo 

si preferís dormir durante días entiendo 

si sentís 

que te fue pisando el mundo entero porque yo 

le di permiso 








mirar la sangre 

que se desliza por la entrepierna irse con ella hasta el origen de lo negado sangre que desprende de sí la memoria 

del miedo sangre 

tiñendo silencios que despiertan 








piel de barro rostro que no sabe 

te escribo por no poder arrancarte de ese lugar esto ya es decirte 

y que no escuches gritarte 

y que no respondas 





tu llanto ya no intenta 








tenías razón 

te abandoné con frecuencia cuando tenías 

el rostro hundido en la alfombra en la tierra en la lluvia 

cuando no había sitio donde caer más que en vos mismo 

te abandoné todas las veces que pude te oculté todas las veces que pude desde la vereda de enfrente 

desde la multitud del colectivo no supe beber 

una sola lágrima tuya para que no cargues con todas 

te inundaste y no te salvé 






martes, 5 de marzo de 2019

Marcia Müller: “Necesitamos espacios para visibilizarnos"


En el Día Internacional de la Mujer se realizará el espectáculo Mucha’s.  Ahí se congregarán las cantantes y compositoras Gicela Méndez Ribeiro, Susy De Pompert, Marcia Müller y Florencia De Pompert. Ellas forman parte del colectivo de Mujeres Chamameceras que eligieron conmemorar su día juntas. La cita es a las 21 en las escalinatas del Teatro Vera.
paulo Ferreyra

“En esta ocasión decidimos hacer visible este grupo con el cual venimos reuniéndonos y charlando puertas adentro sobre nuestra problemáticas”, explicó Marcia. En esta entrevista además cuenta qué significa para ella el proyecto de ley nacional impulsado para que haya un cupo femenino en los festivales y fiestas del país.


“La inciativa de Mucha`s se terminó de consolidar el verano pasado, en enero. Conocía a alguna de las chicas. Hace un año fui a tocar a la Fiesta Nacional del Chamamé en Corrientes y ahí nos encontramos, nos enchamigamos. En ese momento me invitaron para ser parte de este mucha`s. El proyecto busca tener una representante de cada provincia chamamecera del litoral”, explicó.
Marcia Müller es cantante, acordeonista y compositora de Entre Ríos. Intercambiamos mensajes y por medio de las redes charlamos sobre esta presentación. “Este espectáculo será la oportunidad para visualizar la tarea de la mujer y buscaremos generar más espacios de difusión.  El 8 de marzo es un día emblemático para las mujeres. Nosotras queremos poner en valor y en música para la gente parte de este colectivo de mujeres chamameceras. Necesitamos espacios para visibilizarnos. En lo personal es una hermosa emoción. Me siento representante de mi provincia porque somos muchas las mujeres chamameceras”.
El repertorio de la velada será en parte compartido por las cuatro cantantes. Sin embargo, también habrá oportunidad para mostrar de forma individual lo que vienen haciendo. “La temática estará trazada por la mujer. Haremos composiciones de mujeres o que hablan de la mujer”, agregó Marcia.
“Quiero estar en un festival por
mis capacidades y no por cupo femenino”

El año pasado se presentó en el Senado el proyecto de ley de cupo femenino en festivales del país. Entre los argumentos, los datos revelan que solo un 20 por ciento de la grilla es femenino, mientras que en algunos géneros musicales ese porcentaje cae al 5 por ciento.
Al respecto, Marcia Müller desliza: “Por sí solo no hemos aprendido la igualdad de oportunidades en los festivales.  Por ello se está impulsando una ley de cupo femenino a nivel nacional. Siempre digo que si me contratan quiero que me contraten por mi música, no porque sea mujer. Pero quizás esta ley sea un impulso o un primer paso para poder acceder un poco a la igualdad de oportunidades en los escenarios importantes del país.
De esta forma también se busca que no se le niegue el trabajo a las mujeres, porque sabemos que la humanidad tiene una historia machista, donde ha sido liderada por hombres. Las mujeres hemos estado presente desde siempre pero la historia ha sido contada desde los hombres. La música en la argentina no ha sido la excepción. Creo que tenemos que reconstruirnos y tender a la igualdad de oportunidades. Seamos del género que queramos ser. Por ejemplo, esta ley sería una forma de comenzar a entender esta igualdad. No coartar el derecho laboral de las mujeres que hacen música y de las trabajadoras de la cultura. Porque también nosotras vemos en los escenarios muy pocas conductoras, muy pocas animadoras. Aquí buscamos que las oportunidades sean igual para todos”, subrayó.

“Sapukay del Alma”
Marcia Müller comenzó tocando la guitarra. Ya a los 9 años acompañaba a su padre, quien es acordeonista. “Cantaba, hacía recitados en su conjunto chamamecero. Esto lo hacíamos en la ciudad de Campana, Buenos Aires”, cuenta. A los 11, se radicó en Paraná, Entre Ríos.
“A los 17 o 18 años me llegó la curiosidad por el acordeón, el instrumento estaba en casa y así comencé a explorarlo. Fui conociendo el instrumento y después fui entendiendo qué tipo de acordeón quería tocar. Estudie en la escuela de música Constancio Carmiño de Paraná”, relata ya entusiasmada sobre sus inicios en un diálogo de audios de wasap.
“Había tenido que dejar el canto de la mano del acordeón, era un poco triste para mí. Así que luego decidí estudiar canto para tener más herramientas vocales para poder hacerlo con el acordeón. Me formé vocalmente, estudie profesorado de música. Soy profesora de música y en todo ese transcurrir del estudio uno abre la cabeza, uno puede conocer mucho más el mundo de la música y así pude lograr adquirir herramientas técnicas que me dieron la posibilidad de combinar el canto con el acordeón. Estos son mis dos grandes amores en la música. Más tarde llegó la composición”.
Marcia lleva varias composiciones recorriendo su andar de musiquera. Sin embargo, le pido que escoja una en particular, una canción que interpretará este viernes y que la está cantando en los festivales o fiestas donde participa. “Es difícil tomar una composición. Las composiciones tienen momentos, en este momento y hace un tiempo me identifico más con Sapukai del alma, un chamamé cuya poesía le pertenece a Nélida Argentina Zenón, a quien admiro mucho y es una referente musical. Podría decir que es mi madrina artística. La conozco desde muy jovencita, tendría 11 o 12 años cuando la conocí. Siempre me conmovió y me atrajo mucho su poesía. En un momento, la vida nos cruzó y pudimos tocar juntas, nos conocimos más en el camino del andar cotidiano de la música, de convivir y de subir a varios escenarios juntas. Nélida me ofreció esta poesía para que yo la musicalice. Para mí fue un antes y un después en mi composición”, cuenta y su voz se oye alegre, entusiasta, blanca. “Así que Sapukai del alma es la composición que llevo a todos lados. Este viernes 8 de marzo estaré cantando en las escalinatas del Teatro Vera”.
El Instituto de Cultura de la Provincia invita al público correntino a asistir al espectáculo —libre y gratuito— que se presentará este viernes 8, a partir de las 21, en las escalinatas del Teatro Vera. Las voces de cuatro grandes cantoras se unirán para rendir homenaje a la mujer en su día. Lo harán en el marco del ya clásico ciclo “En las puertas del Vera”, que se lleva adelante cada año, previo al inicio de la temporada teatral en el escenario más importante de Corrientes.