Hace unos días atrás se presentó Cabezones en la ciudad de Corrientes. En la previa tocó la banda local Pyrablut. A Cesar Augusto Andino, alma y fundador de Cabezones se lo vio muy activo en todo momento, compartiendo y dialogando con el público. Después del show pudimos intercambiar algunas palabras y reflexiones sobre su entrega total en cada momento del show.
Por Paulo Ferreyra
Foto gentileza La Cueva del Rock
La noche madura rápido en el Patio del Espacio Mariño.
Invito a soñar con sus propuestas artistas – diferentes y diversas – en cada
jornada que abre sus puertas. El sábado último el público llegaba ávido ente la
presentación de la banda nacional Cabezones. En la puerta había ya dispuestas remeras,
stickers, posters, entre otras cosas de la banda.
Cerca de las 23 la ansiedad comenzaba a crecer. De repente
se escucharon uno acordes y el propio Cesar salió a invitar al público para que
pase a la sala. El show iba a comenzar. Después del tercer tema ya todos
estábamos de pie, cantando, celebrando y entonando algunas letras.
Después de los primeros saludos y agradecimientos, Cesar en
varias oportunidades agradeció al público que pagó su entrada para un
espectáculo de música. Además agradeció a José del Espacio Mariño, “este lugar
está cada vez más lindo. Estamos muy contentos de estar acá y poder tocar en
este espacio”, lanzó y los aplausos regaron el ambiente. Hubo un momento donde
hicieron dos covers, de Catupecu y de Charly, “aguante charly” gritó el público
ante esos pequeños destellos de canciones de otros que interpretó la banda.
Casi como un flash de repente Cesar anunciaba que cerraban
la noche. Tenemos que ser respetuosos del horario, lanzó y los acordes de Irte estallaron en la sala. Mientras se
escuchaban los acordes el músico bajó del escenario, bastón en mano y a paso
lento, se acercó a casi todo el público para saludarlos y agradecer su
presencia. Se lo veía conectado, sus gestos lentos no ocultaban el cansancio
pero sus movimientos seguían ahí, caminando por la sala y regalando una
sonrisa.
Cuando terminó el show aceptó conversar con todos. Se
encargó de vender las remeras y los posters. Filmó autógrafo. Se sacó cada foto
que le pidieron, se abrazó o simplemente puso el cuerpo con cada uno y con cada
una que se acercó. Después se reunió con alguien para cerrar los números del
show. Hizo de todo o hizo todo al mismo tiempo. Ya cuando se estaba acercando a
la puerta de salida, me mira con el resto de simpatía que aún guardaba y me
recibió, nos sentamos dos minutos para charlar, no era el momento para una
entrevista de largo aliento.
— Estuviste al comienzo del show invitando a la gente para que entre a
la sala, conectados con ellos durante el concierto y después firmaste cada
autógrafo que te pidieron. Siempre es así, ¿entregar el cuerpo entero?
— Pienso que es así y lo vivo de esta manera. Para las
personas que un día amanecimos con la idea de que nuestra vida iba a ser de una
manera pero un accidente te atraviesa la vida, ahí te das cuenta que te pueda
pasar cualquier cosa en cualquier momento. A partir de ahí me he planteado
hacer lo que hago al cien por ciento, porque puede pasarme lo mismo todos los
días. Así vivo y así lo hago. Pero lo disfruto mucho. Agradezco mucho poder
vivir de lo que hago en un país como este. Es muy difícil vivir del arte en
Argentina. Entonces estoy muy agradecido al público que paga su entrada y eso
es algo muy especial.
— Hiciste un recorrido por distintos discos, ¿fue tú manera de conectar
con lo que el público vino a buscar?
— Si, lamentablemente nos quedamos sin tiempo y quedaron
muchos temas afuera. Es bueno tocar con bandas amigas porque te resuelven
muchas cosas. Además porque es bueno que la gente conozco lo que pasa en el
ámbito local. La idea también es compartir. Pero a veces pasan estas cosas que
después te quedas sin tiempo. Sobre el final empezamos a tocar pedacitos de
canciones y cosas que nos gustan a nosotros. La pasamos muy bien. Disfrutamos
mucho este show.
— Acá en el repertorio de Cabezones hay un cuidado con las letras de
las canciones. También de la música y el sonido que producen, ¿a vos qué te
interesa más o dónde pones más atención?
— En una banda las dos cosas son importantes. No se puede disgregar una cosa de otra. Es un todo, ¿qué es más importante?, el corazón o la mente, es un todo. Por ahí va la importancia de las letras y la música. La palabra acompaña la canción y la música acompaña a las palabras. Es una conjunción, es como si fuera una película - o tu vida - se va edificando con todo.
Juego de canciones
Al cerrar la charla con César hicimos un picado sobre
canciones, sobre dos le pregunté puntualmente y la tercera la dejé para él -
Irte -
Es una despedida, una despedida a una persona que vos pensaste que te iba
acompañar toda la vida y por esas cosas que tiene el transitar - el latir - las
cosas van cambiando de semblante. Eso es la canción irte. Irte es una
despedida, a veces te enojas, a veces perdonas, a veces querés que vuelva, es
una historia resumida en una canción - fue mucho más que eso - pero es una
despedida.
Mi pequeña
infinidad - Esta canción es una celebración al nacimiento de mi
hija. Ella me llenó de amor y de vida. Mi pequeña infinidad es existir y tratar
de ser feliz con quien estás construyendo todo el tiempo una vida. Que la gente
la haya hecho suya es fantástico. Nunca pensé que iba a tener ese halago de que
la gente me acompañe en las canciones.
Todas las
canciones son importantes. Hoy se acercó un chico y me agradeció
porque estuve presente en un momento muy difícil de su vida. El otro me dijo
gracias porque me acompañaste en un momento. De eso se trata las canciones. A mí
me pasa. Cuando en algunos momentos estás solo, los caminos parece que se
cierran y ahí aparece una melodía que te acompaña. entonces pensas que este
tipo escribió lo que me está pasando a mí. Viste que hoy en el concierto cuando
presenté la canción Sueles dejarme solo la escribí yo, era todo lo que me
pasaba a mí. Es como si lo hubiera escrito yo, no tuve esa suerte pero me
siento identificado con todas las canciones que cantamos.
Música
— ¿Que es la música para vos?
La música es mi trabajo, mi pasión, mi vida y lo que sé
hacer. Es como cuando en el medioevo estaba el herrero, el soldado, el que
criaba gallinas, en ese espectro yo sería el creador de canciones, con eso me
conformo.
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